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Asociación de Distribuidoras de Combustibles de Chile

Impuesto Específico a los Combustibles. ¿Justicia Tributaria? ¿Inequidad?

Siempre que el precio del crudo sube internacionalmente, nuestras autoridades tienen que internalizarlo rápidamente por razones obvias y este impuesto hace que el precio en nuestro País se vea abultado dramáticamente.

Este impuesto nace en abril de 1986, después del terremoto de 1985, argumentando que era necesario para la reparación de la infraestructura pública destruida por ese fenómeno natural y por lo tanto era un impuesto transitorio que deben pagar todos los vehículos motorizados que transiten por calles, caminos, carreteras y vías públicas en general del país (artículo n°1 Ley 18502 Ley de Hacienda).

En sus inicios era de 2 UTM por metro cubico que grava las gasolinas y 1.5 UTM por metro cubico que grava el diesel. (Hay que destacar que la UTM varia mensualmente) y el Kerosén domestico está exento de este tributo.

Posteriormente, a partir de los gobiernos de la Concertación, este se empezó a aumentar en forma exponencial y que también iba a ser transitorio lo que nunca a ocurrido de lo cual nuestro gremio expuso en su oportunidad los efectos nocivos que esta medida acarrearía, toda vez que el precio Internacional subiera ya sea por razones geopolíticas, huracanes, tifones, huelgas, incendio en alguna refinería del Golfo de México de los EEUU. Etc. Etc. Lugar que se toma como referencia para internalizar los precios en nuestro país.

Hoy sin embargo el estado determino hace algunos años ceder a particulares las carreteras (mediante concesiones), y las autopistas urbanas por lo tanto los vehículos pagan por utilizar estas carreteras (peaje y tag) cuya construcción es financiada por empresarios particulares. Además en las regiones, la modernización de caminos secundarios y rurales avanza lentamente. Debemos mencionar que cada vehículo además, paga un permiso de circulación, y se tienen que someter a una rigurosa revisión técnica para transitar libremente por nuestras ciudades.

El impuesto específico hoy es un ingreso importante en la recaudación fiscal y en las gasolina ha subido significativamente hasta llegar   a 6 UTM por metro cubico, lo que nos da un valor de $231 por litro a esta fecha y el diesel 1.5 UTM por metro cubico lo que equivale a $57.8 por litro, estas cifras no incluyen el 19% de IVA que pagamos todos los chilenos, sumando ambos impuestos llegamos sobre el 40% que forman parte del precio del combustibles. Es importante destacar que este tributo (IE) es pagado fundamentalmente por automovilistas privados, taxis y pequeños y grandes transportistas, esto es una aberración, puesto que las grandes industrias, mineras y empresas energéticas, entre otros sectores productivos ocupan este impuesto pudiéndolo rebajar como crédito en sus operaciones y ellos consumen el 70% del mercado nacional de los combustibles. El sector automotor demanda solo el 30 % de los combustibles que se venden en nuestro país.

Lo anterior se transforma en una pesada carga impositiva a la clase media y pequeñas empresas, uno de los argumentos que se utiliza para no bajar este impuesto es para desentivar el uso del automóvil y con ello descongestionar calles y contaminación ambiental, creemos que si el transporte público fuese más óptimo en tiempos y frecuencia automáticamente el auto quedaría en casa ya que al costo de combustibles que se paga hay que sumarle el de estacionamientos TAG, entre otros, el uso del automóvil hoy es una necesidad para poder cumplir con nuestras obligaciones y llegar a tiempo al trabajo. Es importante destacar que las empresas que en este minuto no pagan este tributo son las que más contaminan, quizás si este impuesto lo pagáramos todos (en un menor valor), estas estarían obligadas a optimizar este recurso para bajar sus costos operacionales.

Otros dicen muy sueltos de lengua que bajar este tributo se estaría beneficiando a los ricos que representan un pequeño sector, o sea, con eso condenan para siempre a los más pobres a nuncapoder acceder a un automóvil, furgón o camioneta para desenvolverse en una actividad comercial para aportar mayores recursos a sus familias y el qué ya tiene un automóvil, debe destinar más recurso en este ítem (combustible) pudiendo ocuparlo en mejorar la calidad de vida de su familia.

Nuestro gremio propone la eliminación del Impuesto Específico, cambiándolo por un impuesto solidario, y que se page transversalmente por todos los que consumen combustibles líquidos, además que la variación de precio sea Mensual y no semanal , como ocurre hoy.

Fernando Rodríguez Ramírez
Presidente Nacional del Directorio de la Asociación de Distribuidores de Combustibles de Chile Asociación Gremial

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